Nos ha
dejado una gran voluntaria, mejor dicho, VOLUNTARIA con mayúsculas.
Mari siempre
quiso estar en la sombra “no es necesario que la gente sepa lo que hago”, “lo
hago porque tengo tiempo y puedo compartirlo con los demás”, son frases que
ella nos solía decir.
Queremos
utilizar esta carta para recordarte, Mari, compañera voluntaria de ABVADI. Qué
todos el mundo sepa qué fuiste, qué eres, porque aún estás entre nosotros, una
gran mujer, fantástica madre y compañera de viaje.
Una persona
sencilla, amable y dispuesta a colaborar en cualquier actividad que se
realizara, ya fuera un apoyo como voluntaria o en la organización de cualquier
actividad propia de la asociación, como la celebración del Día Mundial del
Voluntariado, día que celebramos juntos y del que formaste parte desde el
primer hasta el último momento.
Muchas
gracias por todo lo que nos diste y por dejarnos formar parte de momentos tan
importantes y bonitos como los que hemos vivido juntas.
Cada una de
nosotras y nosotros te mantendremos viva
en nuestros corazones, recordándote desde tu alegría, desde la espontaneidad
que te caracterizaba, desde la entereza y fuerza que tenías y que nos trasmitías
para superar todas las dificultades con las que tuviste que vivir.
Es difícil
continuar sin una voluntaria como tú, difícil las reuniones sin tu presencia,
difícil programar un apoyo y no poder contar con tu disponibilidad y ganas de
hacer, difícil… pero sabemos que tú estés donde estés nos seguirás ayudando,
apoyando y animándonos a continuar con nuestra labor como voluntarios, labor
que tú por desgracia no has podido continuar.
Honramos tu
memoria haciendo uso de todas estas actitudes que poseías y te invitamos a que
nos sigas acompañando por siempre, porque lo cierto es que tú no te has ido aún.
Sabemos lo que te quedó por hacer y precisamente seremos “tus voluntarios” los
que hagamos lo que a ti te hubiera gustado realizar: ayudar a los demás siempre
con una sonrisa.
Todos te
recordaremos siempre por lo que has hecho y por lo mucho que te quedó por
hacer.
Gracias
Mari, te invitamos a que nos sigas acompañando por siempre una vez más.
Fd. Siempre
en nuestros corazones, voluntarios y voluntarias de AVBADI